El lunes 4 de agosto, fiesta del Santo Cura de Ars, patrono de los párrocos, se realizó el Jubileo de los sacerdotes y seminaristas de nuestra Arquidiócesis. Fue una jornada de oración, encuentro fraterno y gratitud por la vocación.
La actividad comenzó con un desayuno en la Parroquia Santos Ángeles Custodios. Luego de la oración, los sacerdotes vivieron un momento profundo de reconciliación personal y desde allí fueron caminando hacia otras iglesias de la capital para reflexionar sobre el júbilo de entregar la vida entera al Señor.
Fue una peregrinación que vistió de fraternidad y alegría las calles céntricas de la capital, demostrando que el sacerdocio es una vocación necesaria, reconfortante y desafiante en nuestro mundo actual.
De esto, les habló el Cardenal Fernando Chomali durante la celebración Eucarística en la Catedral Metropolitana.
“Estamos en medio de una sociedad fatigada y abatida. Estamos en una sociedad que no sabe dónde va. Nosotros somos los pastores. Estamos llamados a llevar la buena noticia de la muerte y resurrección de Jesucristo”, afirmó.
El encuentro culminó con un almuerzo comunitario en el Salón Papa Francisco, donde los participantes compartieron con alegría los frutos de la jornada.
Comprometamos siempre nuestra oración por nuestros sacerdotes, en especial por nuestro párroco padre Andrés, para que el Señor los fortalezca y consuele en su entrega diaria.
