La historia de nuestra parroquia, es muy bella, comienza hace más de 26 años, en 1987, con el nombre de parroquia San Luis de Las Condes, siendo su párroco el padre Augusto Larraín (QEPD). Nuestra parroquia formaba parte de la parroquia de la Transfiguración.
En los primeros años, con.mucho entusiasmo y pocos recursos, la misa se celebraba en una casa parroquial de calle Brasilia ó en la misma plaza, Brasilia con lluvia o con sol. El diacono Iván Valenzuela era gran participe y motor de la parroquia en estos años iniciales.
Seis años más tarde, en 1994, asumió como párroco nuestro querido padre Roberto Espejo pasando a ser una parroquia independiente.
El Padre Roberto desde el inicio trabajó con gran entusiasmo y éxito por el crecimiento pastoral y material de la parroquia y gestionó el comodato del actual terreno con la Municipalidad de Las Condes.
Mientras se hacía estas gestiones, la comunidad rezó muchos rosarios a la Virgen María por lo que luego de otorgado el comodato pidió el cambio de nombre de la parroquia San Luis, por el de Nuestra Señora del Rosario. El nombre no fue al azar, ya que se descubrieron registros de la existencia de una Capilla llamada Nuestra Señora del Rosario que existió en este lugar por el año 1670.
El 8 de diciembre de 1996, el Arzobispo de Santiago, Monseñor Carlos Oviedo bendijo la primera piedra. La construcción del templo se inició un año después, mientras tanto la Santa Misa se celabraba en una carpa al costado del sitio.
Parroquia en obra gruesa. La mayor parte de las construcciones se ubica bajo el suelo para respertar la constructibilidad en el parque. El diseño es del arquitecto Patricio Morelli.
Una vez construida la obra gruesa, la Santa Misa se celebraba al interior del templo mientras se ejecutaban los trabajos de terminación: el cielo raso, el piso de baldosas, el enladrillado de la pared…lo que tomó varios años, a medida que la comunidad reunía los fondos con campañas, bingos y muchas actividades.
En marzo de 2005 asume como párroco el Padre Carlos Yrarrázaval quién solicita la consagración e inicia las gestiones y campañas para la construcción del campanario.
El templo es consgrado el 7 de octubre de 2007 por el Arzobispo Francisco Javier Errazuriz.
El Padre Carlos, antes de dejarnos, bendijo las tres bellas campanas que había traído desde Alemania y que esperaban el campanario desde hace tiempo.
En 2011 asume la parroquia el Padre Pedro Pablo Garín. La construcción se inició poco después de su partida bendiciéndolo el padre Pedro Pablo, el año 2011.
El 5 de Octubre 2013 con la bendición del Arzobispo de Santiago, Monseñor Ricardo Ezatti, por iniciativa del padre Pedro Pablo Garín, se inaugura la Capilla de Adoración Perpetua, sueño de muchos hermanos que quisieron tener un lugar especial para Adorar y Amar a nuestro Señor de forma permanente.
Desde sus inicios en 1987 la parroquia ha tenido un continuo crecimiento pastoral y misionero.
Hoy día, nuestra parroquia tiene 19 pastorales activas, agrupadas en 10 áreas diferentes, con muchas personas trabajando en ellas. Estos últimos años, se han integrado muchas personas nuevas a las distintas pastorales, como también han nacido otras nuevas como la pastoral de Liturgia, el grupo Betania o pastoral de acogida y la pastoral de adulto mayor.
La comunidad, desde hace muchos años, organiza actividades orientadas a la convivencia y al encuentro familiar, como lo son el Bingo tradicional y la Kermesse donde nos juntamos muchas familias a compartir y a conocernos. Las fiestas anteriores, junto con lo obtenido por las ventas de nuestro Bazar de artículos y ropa usada, generan recursos que se destinaban a la construcción de la parroquia y hoy, ya terminada, principalmente a obras sociales.
Este quiere ser nuestro sello: una parroquia solidaria, formada por una comunidad comprometida con el más desposeído, generosa, llena de vida, en movimiento constante, una comunidad en formación, una comunidad que salga al encuentro, al rescate de las almas dormidas.
Queremos ser una parroquia que acoja a todas las personas que vienen a encontrarse con Cristo Resucitado. Una parroquia que está SIEMPRE CON PUERTAS ABIERTAS, las 24 horas, para recibir a quien lo necesite.
